aprende con penelope
la historia se repite hasta que aprendemos las lecciones necesarias para cambiar nuestro camino
Un viernes cualquiera había pasado todo el día caliente, deseando que llegará mi novio (Juan) para follar toda la noche. Lo esperé con un vestido muy corto y ajustado, una vez que llegó le dije:
C: Hoy quiero que me trates como una prostituta.
Mi novio no perdió tiempo, para desnudarse y comenzar a follarme; mientras follábamos me preguntó, que, si quería ir al bar del hotel, donde contratan prostitutas y que había ido en otra oportunidad, yo respondí que sí y seguimos follando. Al terminar de follar, él dijo:
J: Voy a ducharme, usted solo arréglese un poco así pensarán que eres una prostituta real.
Llegamos al sitio, mi novio se sentó en una mesa esquinera y yo me senté en una mesa más visible, pronto ingresaron dos personas, una muy joven y otro un poco mayor. El más joven se sentó en una mesa y el otro chico se dirigió a mí y me comentó que quería regalar una noche con una prostituta a su sobrino que estaba cumpliendo 18 años. Sinceramente lo pensé mucho, porque esos no eran mis planes, pero también pensé que yo podría ser más cuidadosa y evitar que tuviera una mala experiencia en su primera vez. Al final dije que sí. Me dijeron que el chico se llamaba Alexandre, lo saludé y fuimos hacia la recepción para solicitar la habitación, no obstante, el tío me pidió que intercambiáramos número de móvil por si pasaba algo.
De camino a la habitación, Alexandre me iba contando sobre la vida. Su tío quería que se hiciera hombre conmigo, pues recién cumplía la mayoría de edad. Él algo nervioso y tímido, me contó que cuando el tío se lo había propuesto, él dijo que no pero que su tío había seguido insistiendo. Por mi parte, yo me iba arrepintiendo y me recriminaba porque era tan impulsiva y no pensaba más antes de hablar.
Al llegar a la habitación le dije:
C: Yo trataré de complacerte en todo y que disfrutes mucho esta noche, así que por hoy eres quien da las órdenes.
Una vez dicho esto, caminé hacia él y le dije al oído, eres muy guapo y me gustaría que me besarás. Alexandre se puso rojo, pero comenzó a besarme y le dije:
C: Puedes tocarme, lo estoy deseando.
Llevé sus manos a mis nalgas y las puse sobre ellas, no obstante, sus manos se quedaron quietas.
C: ¿Quieres desnudarme o que yo me desnude para ti?
A: Lo segundo
Decidí tomar la iniciativa, por lo que lo lleve a la cama, lo acosté boca arriba, me senté sobre sus piernas casi sobre su pene, me quite por encima el vestido, quedando a la vista, mis tetas y un sexy hilo negro. Llevé mis tetas a su boca, primero las besó con ternura, pero después comenzó a chuparlas y succionarlas. Estuvo así un rato, luego lo comencé a desnudar, comenzando por su camisa y terminando con su bóxer. Una vez que su pene fue liberado, comencé a darle sexo oral, pero rápidamente sentí que su pene estaba muy duro, en señal de que estaba por eyacular, por lo que me puse de pie y para que Alexandre me viera solo con el hilo y observará como me lo iba quitando.
increíblemente, Alexandre comenzó a masturbarse mientras me observaba, como me quitaba el hilo y le mostraba mi coño. Como era de esperar no tardó en correrse.
¡Al ver su pene lanzando semen, solo pude pensar en que los hombres a todas las edades son tan brutos!
Pase uno de mis dedos por su pene, para recoger residuos de semen que bajaban lentamente por su pene, llevé mi dedo a mi boca y lo chupe diciendo que delicia. Posteriormente me subí a la cama y comencé a besarlo mientras le pedía que tocará mis tetas y glúteos. Después baje a darle sexo oral y tal y como lo pensé rápidamente su pene estaba nuevamente listo para la acción, le acerque un preservativo para que se lo pusiera y me puse de 4 con mi cabeza sobre la almohada, primero tuve que ayudarle un poco para introducirlo, pero después de eso comenzó un mete y saca, un poco irregular. Pensándolo bien, me excito más el tiempo que duró penetrándome que la penetración en sí. Después pasamos a la clásica posición de misionero donde ya con más confianza siguió haciendo hasta que se corrió.
Recordando que estaba actuando como una prostituta, le quite el preservativo, limpie su pene con mi boca, luego tome el preservativo y me lleve su contenido a mi boca y me lo trague, diciéndole que me encantaba el sabor de su semen.
Lo besé y le dije que era hora de bajar si no, su tío tendría que pagar una hora adicional. En el ascensor, Alexandre puso su mano sobre una de mis nalgas, solo lo miré y le regalé una sonrisa.
Fui directo donde estaba mi novio, él terminó su trago mientras conversábamos y salimos hacia el departamento. Antes de salir tenía un mensaje del tío que quería otra noche conmigo para él solito.
El tío se llama Tom y a partir de ese momento comenzamos a intercambiar mensajes pues él deseaba contratarme. Yo le confesé que no era una prostituta que lo había hecho como un juego con mi novio, pero nada más; esta confesión más bien lo motivó más a seguir escribiendo. Les transcribo un resumen de las conversaciones más ardientes que tuve con Tom, más o menos 2 días, después de mi encuentro con Alexandre.
Tom trabaja como chofer de Uber, es alto, un cuerpo atlético, gracias a que no falta al gimnasio, es muy moreno, no tiene un solo vello de cabello y tiene 29 años.
Las conversaciones comenzaron con las preguntas clásicas: como la edad, donde vive, etc. y etc.
T: ¿Me vas a hacer un descuento?
C: No lo sé. Tal vez hasta de gratis, pero soy muy selectiva.
T: Te excitan los negros. Creo que ya has probado y te quedo gustando.
C: ¿Cómo tratas a las putas?
T: Las cojo duro y por bastante rato.
Yo guardé silencio, pero Tom ataco…
T: Muéstrame tus tetas. Alexandre me dijo que están muy buenas.
C: Me imagino que como taxista o ahora con Uber algunas chicas quieren pagarte con sexo.
T: solo acepto este pago con los turistas. Me encanta hacerlas chillar.
C: Te notó muy confiando en lo bueno que eres follando.
Unos momentos después recibí una foto de su pene. El cual se veía grande pero no estaba duro y seguidamente escribió:
T: Cuando lo veas duro te va a gusta más.
Yo respondí con un emoticón de una cara con la boca abierta y los ojos salidos.
T: Ahora compórtate como la puta que eres y muéstrame las tetas.
C: Te confieso que no soy puta, solo me gusta ese mundo y de vez en cuando me hago pasar por una, más que todo por un extraño juego que tengo con mi novio.
C: Acepté hacerlo con Alexandre pues no quería que tuviera una mala experiencia en su primera vez y porque me pareció lindo.
Luego le envíe una foto de frente de mis tetas y le escribí: te la ganaste.
T: Te creo pues nunca te había visto en Hotel y Bar Gran Casino. Además de que lo que me contó Alexandre no parecía propio de una puta.
T: Tienes unas tetas buenas y estoy seguro de que la conversación te tiene caliente.
C: Si, pero pudiera estar más caliente
Tom me envió un video donde se ve tocándose y como su pene comienza a ganar tamaño
C: Mmmmm así me gustan Mmmmm
T: Cuando nos vemos para que lo pruebes.
Le envié una foto mía en hilo y le escribí: ¿podrás con todo esto?
T: Yo sé que lo estás deseando, quieres que te folle duro y suplicar que no pare de metértela, te voy a hacer mi puta personal.
T: Voy a hacer dinero contigo. Te voy a alquilar a mis amigos y a los amigos de Alexandre.
C: Creo que alguien se excito más de la cuenta.
T: Quiero ver tu trasero.
Yo simplemente lo complací con una foto de pie, de espaldas a la cámara y sin hilo. La foto iba acompañada del mensaje ¿Te gusta mi trasero?
Tom me dejó en visto. A rato…
T: Tu culo está mejor que tus tetas. No puedo esperar para metértela.
C: Tal vez otro día. Acabo de masturbarme y estoy satisfecha
Al otro día, le escribí:
C: Quieres follarme
T: eres una calientapollas
C: me acabo de quitar la blusa, para leer la última vez que estuviste con una puta.
T: Fui a Casanova, busqué una chica alta, con buen culo y tetas. Negocié el precio y subimos a la habitación.
En la habitación, le pedí a la chica que se desnudara por completo, yo hice lo mismo y le dije ven a mamar este rico pene.
La chica lo hizo y comenzó a mamar, le di un golpe por la cara y le dije mírame cuando me lo chupas.
C: A mí no me puedes golpear la cara, si lo haces me voy en el acto.
T: Fue suave pero no te lo haré, puedes confiar en mí.
C: Estoy muy húmeda, mis pezones esta parados, continua..
T: Ella me siguió manando como se lo pedí, después le dije que ya era suficiente y me acosté en la cama boca arriba y le pedí que se sentará lentamente sobre mi pene. Ella chillaba mientras se metía todo mi pene y después comenzó a moverse mientras yo pellizcaba sus pezones y le decía lo puta que era y que se estaba ganando cada billete que le había pagado
T: ¿Te gustaría que te hiciera lo mismo?
C: Ahora mismo me lo estoy imaginando.
T: ¿Quieres ver mi pene duro?
C: Por favor quiero ver ese pene.
Él me envió un video con su pene duro y con su mano, tapaba la punta con la misma piel de su pene y lo volvía a bajar. Su pene sin duda era de un tamaño considerable.
Yo le devolví un video donde estaba abierta de pierna y mis dedos frotaban mi coño, sobre la escasa tela de mi hilo. Me asegure que en el video se escuchará claramente que decía “eres un cabrón por ponerme tan caliente”.
T ¿Ahora quién quiere follarse a quién?
C: Dime más sobre lo que hiciste con esa puta.
T: Después la follé de lado, por detrás mientras le apretaba las tetas y le decía al oído, te gusta mi pene, te gusta que te folle un negro. Ella solo chillaba.
Le envíe un nuevo video, en la misma posición solo que esta vez, estaba teniendo un orgasmo intenso pues mi cuerpo se movía y mis piernas y dedos de los pies estaban tensos.
T: Aunque digas que no eres puta; si te comportas como una.
Le respondí con un nuevo video, donde me llevo los dedos a mi boca y los chupo y lo acompañe con la siguiente frase: ¿Te gusta que me comporte como una puta?
T: Lo que necesitas es que un negro de folle bien para que aprendas lo que es follar.
C: ¿me quieres enseñar?
T: Solo estoy esperando que me digas cuando.
Después entró un video de Tom frente a un espejo, donde se está masturbando y se corre, toma un poco de semen y se chupa los dedos y me dice no sabes lo puerco que soy.
Le envié otro video donde sigo masturbándome y le escribí: no puedo evitarlo al ver ese pene expulsando leche.
T: Te espero mañana a las 20 horas en Hotel y Bar Gran Casino. No faltes.
C: No puedo esperar.
Tom no respondió más.
Por la noche, le di mi móvil a mi novio, para que leyera la conversación con Tom mientras yo le daba sexo oral. Mi novio que es de mente muy abierta y que tiene total confianza en mí, solo me dijo quiero todos los detalles a tu regreso.
Al día siguiente, más o menos al medio día, recibí unas fotos de Tom desnudo que decía:
T: Para que te toques mientras esperas que sea de noche.
C: Ya lo hice, pero puedo volver a hacerlo. Estoy realmente deseosa.
T: En la noche necesito que me obedezcas, desde ahora soy tu negro.
No respondí solo le envié una foto de 4 hilos y le dije ¿cuál deseas que use?
T: Usa el rojo con negro. El resto de ropa no me interesa que uses, solamente no lleves brassier.
C: Esa elección me gusta. ¿Qué tienes pensado para la noche?
T Hacer que chilles mucho y que supliques que deseas que te siga follando.
C: Estás muy seguro, ya lo veremos.
T: Vas a experimentar el mejor sexo de tu vida.
C: Eso espero y deseo.
C: Estoy deseando que me folles con ese pene grande y venoso.
T: Tengo que ir a trabajar, te veo a las 8
Le envié una foto de mis tetas con el mensaje: no puedo esperar.
Para mi encuentro escogí un pantalón roto, una blusa de cuello alto, el hilo autorizado por Tom y lógicamente sin brassier.
Ya en el Hotel, llegué antes que él, aunque no tuve que esperar mucho, al ingresar me saludo, conversamos rápidamente y me dijo: Vamos
Me levanté y lo seguí. Tom me toco las nalgas, frente a todos los que estaban en el lugar y dijo estás riquísima, solo sonreí y continúe caminando.
En la recepción, yo pedí la habitación, mientras realizaba el proceso, Tom no hizo más que tocar mis nalgas y pasar su pene sobre ellas.
Al momento de pagar, volví a verlo, pero él solamente respondió en voz alta, pagué usted, no sé si como puta vales la pena.
En el ascensor, apenas entramos, comenzó a besarme, mientras que apretaba mis tetas (con sus dedos pulgar e índice apretaba mis pezones) los cuales ya de por si estaban duros. Me hizo gemir varias veces de la excitación mientras subíamos al piso 7.
En la habitación, siguió besándome y alternando sus manos entre mis tetas y mi culo. Después me pidió que me desnudará, mientras lo hacía me decía: que rica estás, puta. Así me gustan las putas, hoy te voy a follar como te mereces, querías un negro aquí me tienes.
Él me pidió que besará su cuerpo mientras lo iba desnudando, lo hice obedientemente, primero su camisa, bese su cuello para luego bajar, después le quite los pantalones y su slip, bese su pene que ya estaba ganando tamaño, me mordí el labio mirándolo, le di varios besos a su pene y subí nuevamente besándolo hasta llegar a su boca.
Tom me tomó del cabello y me jalo hacia su pene y me dijo:
— empieza a mamar, zorra.
Recordé lo que había escrito en el chat por lo que lo hice mirándolo a los ojos. Él con su mano, marcaba el ritmo de la mamada…
T: Que rico lo haces, que rico te la comes, sigue tragando, no pares, no pares, eres una diosa, no pares.
De un momento a otro, Tom me dijo, tráeme una cerveza del mini bar, me incorporé y fui a buscar su cerveza. Tom estaba sentado sobre la cama, le di la cerveza y me dijo que Alexandre no se había equivocado, tienes un cuerpo de puta madre. Tomó unos sorbos y luego me jalo hacia donde estaba él, dejó caer unas gotas de cerveza en mis tetas para posteriormente mamarlas…
T: ¿estás disfrutando?
C: Si, mi negro.
T: Esto apenas comienza
C: No esperaría menos de ti. Si estos son las preliminares, lo voy a pasar muy bien.
Tom volvió a chupar mis tetas bañadas en cerveza, hasta que se acabó la cerveza.
Luego se acostó en la cama, se puso un preservativo, se masturbo rápidamente mientras yo lo veía atentamente y me pidió que me sentara sobre su pene, lo hice y fue entrando en mi coño lentamente, cuando estuvo totalmente adentro, Tom me jalo hacia donde él, me comenzó a besar, luego tomó fuerte mis nalgas para que no pudiera moverme y comenzó a embestirme con movimientos cortos, profundos y rápidos. Así me corrí. Tom sacó su pene, lo tomó con su mano por debajo y comenzó a frotar mi coño, lo que me provocó un nuevo orgasmo, después me volvió a penetrar, primero al ritmo de él y posteriormente dejo que me moviera a mi ritmo, mientras me aplicaba la misma técnica que había usado antes para pellizcar los pezones. Tom me pregunto si estaba disfrutando y yo le respondí…
— no sabes cuanto, mi negro.
Tom me apretó el culo con fuerza y me dijo que culo más grande y sabroso tienes, inmediatamente me dio unas palmadas en sus nalgas mirándole a la cara, las cuales fueron subiendo de intensidad, cuando iba a quejarme, procedió a besarme mientras que acariciaba ahora mis nalgas, justo donde las había estado golpeando. Cuando terminamos de besarnos, le dije eres un cabrón y Tom respondió, pero te gusta y me volvió a besar. Seguimos en esa posición por más rato, algunas veces Tom hacía el esfuerzo de meterla y sacarla y en otras era yo la que me movía. Siempre alternando con besos, pellizcos y mamadas de tetas. Hasta que Tom se corrió.
Ambos estábamos bañados en sudor y nos quedamos en la cama unos instantes en silencio. Tom se quitó el preservativo y lo tiró a un lado.
Yo me levanté, fui al baño, al regreso le alcancé otra cerveza y le dije…
— estuvo excelente. Tom bebió de la cerveza y dijo: esto no ha acabado, apenas comenzamos.
Yo me reí y recordé que acababa de verme en el espejo del baño y tenía todo el cabello enredado, sudaba por todos mis poros. Así que no había duda de que acababa de follar por largo rato y le respondí: por mi mejor.
Tom se sentó sobre la cama a tomarse la cerveza y yo me senté frente a él con las piernas abiertas, me pidió que le contará los detalles de la noche con Alexandre, mientras le contaba, él pasaba la lata fría por mis tetas y con su pie acariciaba mi coño, lo cual me hizo llegar al borde del orgasmo. Tom terminó la cerveza y se levantó a orinar.
A su regreso, yo estaba de 4 en la cama y le dije…
C: azótame las nalgas.
Tom no le pensó dos veces y se subió a la cama y me pregunto:
T: ¿Te sientes muy puta ofreciéndome que te azote? Y a continuación me dio una palmada en mi nalga izquierda.
C: Si, me siento puta y a ti te gusta.
Tom me volvió a dar otra palmada y me dijo solo responde lo que yo te pregunto.
C: Si, mi negro.
T: Te he hecho gozar mucho y una nueva palmada.
C: Si, cumpliste lo que prometiste
T: Te gusta que te azote y me continúa dando palmadas
C: Soy tu puta y como tal quiero que me trates
T: Mmm ¿Quieres que te la vuelva a meter?
C: Si, quiero que me folles duro.
Tom comenzó a frotar su pene en mi coño, el cual fue ganando tamaño de nuevo y llegué al orgasmo cuando sentí la punta de su pene entrar. Siguió haciendo lo mismo y dándome palmadas, Yo solo gemía de lo caliente que estaba. Después se puso un nuevo preservativo y comenzó a follarme.
C: No pares por favor, sigue metiéndomela toda, así siii.
T: El sábado le haré una nueva fiesta a Alexandre y quiero que vengas.
C: No se si podré.
T: Dime que si iras, si no, me pongo la ropa y me voy. Y me dio una nueva palmada en mis nalgas.
C: Si, voy a ir, si voy a ir, pero no te detengas. Estoy a punto de correrme.
Tom no dijo nada, solo aceleró sus embestidas y para que tuviera un nuevo orgasmo.
T: Iras y sin poner condiciones
C: Siiii
Me acosté boca arriba en la cama, Tom me comenzó a besar, luego besó mi cuello, bajó a mis tetas, los besos, mamo, succiono y luego bajo a mi coño, donde lo chupo por un rato mientras que con dos dedos me penetraba, yo solo podía gemir.
Luego Tom se incorporó quedando de rodillas, puso mis piernas sobre su cintura, levantó mi cuerpo y comenzó a penetrarme. También apretaba mis pezones y les daba vueltas como si pudieran rotar. Tuve varios orgasmos seguidos, Tom salió de mi coño, se quitó el preservativo y puso su pene en mi cara. Yo tuve que esperar instrucciones para comenzar a mamarlo, hasta que Tom tuvo una corrida monumental, no pude tragar todo conforme iba saliendo, se me escapaba por los espacios entre sus labios y su pene. Una vez que Tom terminó de correrse, vio que me estaba tocando el coño y me dijo…
T: eres bien puta.
Tom me dijo que estaba muy cansado, que él se iba a quedar a dormir en la habitación, que si quería me quedara o me podía ir. Le dije que prefería irme pues tenía que trabajar por la mañana.
T: Trabajar de puta o de un trabajo real y comenzó a reír.
Yo estaba bastante cansada, así que fui al baño, me enjuague la boca, trate de peinarme, me puse la ropa y fui a despedirme de Tom. Tom cuando me vio salir del baño me dijo…
— no olvides la cita del sábado.
Me acerqué, le di un beso corto en la boca, pero Tom me jalo y me dio un beso largo, mientras yo acariciaba su pene. Cuando terminó el beso, le dije…
— yo siempre cumplo con mi palabra y salí de la habitación.
Saliendo del ascensor un tipo me dijo si estaba disponible. Yo le miré y le dije que ya había tenido suficiente sexo por el día de hoy, que tal vez en otra oportunidad.
Luego de este encuentro seguí en contacto con Tom, tenía mucha curiosidad por la actividad del sábado, pero pese a mi insistencia no me dio mayores detalles.
Llegado el sábado quedamos de vernos a las 9pm. en un determinado lugar…
T: Mejor no te hubieras puesto ropa. (yo usaba un vestido negro muy ajustado de una sola pieza, que realzaban mis pechos y mis piernas)
C: ¿Te gusta?
T: me pones duro todo esto (tocándose el pene)
C: Esa era mi intención. Ahora sí me dirás quienes estarán en la fiesta.
T: Somos como 6 personas, Alexandre, 3 amigos de él, de los cuales dos están con sus novias.
C ¿Todos son mayores de edad?
T: no te preocupes. Igual no follarás con todos, a menos que yo te lo pida.
Le di un beso en la boca y le dije ya lo veremos, recuerda que si no me gusta lo que me piden simplemente me voy.
Llegamos a la casa, era una casa pequeña humilde. Cuando se bajaron, Tom me dijo…
— Ven para verte bien. Que buena estas y comenzó a besarme y tocarme las nalgas en la acera frente a la casa.
Me quiso levantar el vestido, pero no lo dejé. Entramos a la casa y en la sala estaban los chicos y las dos chicas. Tom me presento. Todos estaban bebiendo y al parecer desde hacía un buen rato. Tenían música y estaban hablando y contando historias.
Me iba a sentar en una silla, pero Tom me dijo siéntate aquí y me pidió que me sentará en sus piernas, me ofrecieron algo de beber y siguieron conversando. Tom no dejaba de tocarme las nalgas y la espalda, además de besarme cada vez que podía, y de tocar mis tetas, pero yo le quitaba las manos apenas podía. Al rato, Tom propuso que movieran una mesa para poder bailar.
Tom y yo comenzamos a bailar, yo me movía lo más sexi que podía y Tom cada vez que podía se pegaba a mi para tocarme; pusieron música más movida y pegue mi trasero a la entrepierna de Tom y note que ya su pene estaba muy duro.
Le dije al oído, quiero que me folles. Tom me tomó de las manos y me llevó para dentro de la casa. Cuando íbamos de camino, noté que las paredes no llegaban a techo, quedaba como un espacio entre la pared y el techo. Además de que las paredes eran de madera. Entré con Tom a un cuarto, cerré la puerta con llave y me acerqué a Tom que estaba ya sentado en la cama y le di un beso, mientras pasaba mi rodilla por su pene.
Tom hizo que me incorporará, me tomó el vestido y lo bajo para dejarme la tetas al descubierto y comenzó a chuparlas con muchas ganas. Adicionalmente, me subió el vestido para tocar mis nalgas. Me decía que ricas tetas. Yo estaba concentrada en lo que me estaban haciendo, cuando escuché risas detrás de ella, volví a mirar a Tom y le dije… me lo imaginé, Tom me dio un azote en las nalgas y me dijo no seas tímida y siguió mamándome las tetas, intenté detenerlo, pero, me tenía bien sujeta de las nalgas, momentos después me comenzó a besar hasta que yo cedí. Nos seguimos besando pese a las risas que oía de fuera de la habitación. Yo estaba de espaldas, pero sabía que los chicos estarían mirando entre los pequeños orificios de la pared.
Después Tom me dio la vuelta y me sentó sobre sus piernas mientras me besaba de lado y comenzó a apretar fuerte las tetas y pellizcarme los pezones y me dijo al oído…
— desnúdate para mí. No, perdón, desnúdate para todos, mientras que soltaba una carcajada.
En ese punto, yo ya estaba muy caliente. Yo me aleje, hice que el vestido cayera sobre mis pies, di dos vueltas como modelando y me quité el hilo.
T: ven aquí puta barata.
Caminé hacia él, Tom me dio un preservativo en la mano, interprete que quería follar y no que le diera sexo oral, así que le quite la camisa, le baje el pantalón y el bóxer, le puse el preservativo, me puse de espaldas a él, tome su pene y lo lleve a mi coño, para introducírmelo lentamente. Tom me decía…
T: Puta todavía hay carne afuera.
T: Para ser puta tienes muy apretadito ese chocho.
T: Disfrutas meterte mi pene. Yo solo gemía más fuerte y bajaba un poco más. Tom me dio un azote y me dijo: responde puta barata.
C: Si me encanta como me follas.
T: muévete puta, gánate el dinero.
comencé a moverme de arriba abajo y en círculos. Así tuve el primer orgasmo y me corrí intensamente. Nuevamente escuché las voces susurrar fuera del cuarto y pensé que estos críos nunca habían visto una mujer correrse.
Seguimos follando y después, Tom me levanto sin sacar su pene de mi coño y me puso de 4 sobre la cama y comenzó a penetrarme mientras me jalaba el cabello, al rato, Tom sacó su pene, se quitó el preservativo y se corrió en mi espalda y nalgas. Cuando terminó de correrse, sacó su pene por mis nalgas y le dio una nueva palmada y me dijo…
— detrás de esa puerta está el baño.
Me levanté para ir al baño, Tom me tomó de la mano, me jalo hacia él, me beso y me pregunto ¿te gusto? Yo le respondí Tú qué crees. Él solo sonrió y me dejó ir.
Cuando salí del baño, Tom no estaba, busqué mi ropa y fui hacia la sala. Al llegar, solo había una pareja que se estaban besando, Tom estaba conversando con los otros dos chicos, al llegar Tom me llamó y nuevamente me beso, los chicos se volvían a mirar y reían. Pregunté por la otra pareja, Tom dijo…
— mínimo deben estar mamándosela o follando después del espectáculo que les diste. Por cierto, Alexandre quiere bailar contigo.
C: será un placer
Tom escogió la música y comenzamos a bailar.
Yo aproveché para preguntarle a Alexandre si le había gustado la otra noche y si ya había practicado con alguna chica, pero Alexandre solo sonreía o decía sí o no. Cuando terminó la canción, Tom dijo cambio y el otro chico cambió con Alexandre, el otro chico si fue más atrevido, me decía que era muy linda y que si en serio era prostituta.
Le pedí algo para beber a Tom, como una persona que aprende rápido, esperé que él se sentará para sentarme en sus regazos. Los hombres comenzaron a conversar de Fútbol y las chicas solo escuchaban y se reían cuando sus miradas se encontraban.
Tom, dejo de meterme mano mientras que conversaban y yo terminaba de tomar la bebida. Una vez que terminé comenzó nuevamente a tocar mis nalgas, a besarlas, intento bajarme el vestido para que me quedarán las tetas al aire, pero yo no lo deje. Tom me tomó de la barbilla y me volvió hacia donde él y me dijo muy serio…
— olvidas que debes ser obediente, además olvidas que ya te vieron hasta teniendo un orgasmo y me beso en la boca. Todos se quedaron callados.
Pasados unos minutos, Tom volvió al ataque y me bajó el vestido, no opuse resistencia. Tom me dijo…
— así me gusta.
Los chicos y la chica no dejaban de mirarme. Tom comenzó a besarme y después a sobar mis tetas frente a los chicos sin ningún pudor, lo deje hacer, al final Tom tenía razón ya les había brindado un espectáculo antes.
Vi de reojo que la chica y el chico también se estaban besando. El chico hacía lo mismo que Tom sobre la blusa de la chica, en un momento, vi que la chica tomó las manos del chico y las metió debajo de la blusa. Tom me dijo al oído…
— relájate hoy solo yo te voy a follar, pero si vamos a jugar con ellos.
C: que tienes en mente.
T: espera y lo verás.
En ese momento, la pareja dijo que era hora de irse. Todos se rieron y se despidieron.
Tom les dijo, nosotros ya volvemos… no se vayan y me llevó al cuarto nuevamente.
Me tomo por la espalda, comenzó a besarme el cuello, se sacó el pene, me levantó el vestido y comenzó a pasarlo por mis nalgas, me bajo el hilo, y me hizo abrirme de piernas, inclinándome, poniendo las manos sobre la cama y comenzó a frotar su pene sobre mi coño, mientras que apretaba las tetas con fuerza…
T: ¿Quieres que te la meta?
C: si quiero sentirla adentro, pero ponte el preservativo.
T: espera.
Me introdujo solo el glande y lo sacó, así lo hizo varias veces, Yo estaba muy caliente por lo que me hacía atrás, pero él también se alejaba permitiendo solamente un roce más profundo por un segundo.
T: ¿Quieres que te llene de leche?
C: Métemela ya, no puedo esperar.
T: ¿La deseas mucho?
C: Si deseo tenerla adentro cabrón.
Fui a masturbarme, pero Tom no me dejó.
T: No lo hagas y me dio una palmada en las nalgas. Eso me originó un orgasmo muy intenso.
Y: Ya veo que te gustan los azotes más de lo que quieres reconocer. ¿Es así? Y me dio varios azotes seguidos.
C: Si, pero quiero que me folles, cabrón.
T: ¿Harás lo que yo dijo?
C: Dime que tengo que hacer, voy a hacer lo que me pidas, pero no te pases.
T: Así me gusta puta barata.
T: quieres hacerte la rebelde, pero en tu interior sabes que te encanta todo lo que te hago.
Ahora, ponte la ropa y sígueme.
C: No seas cabrón, terminemos.
T: Más tarde, apenas estamos comenzando.
C: Eres un hijo de perra, negro cabrón.
Me vestí y seguí a Tom a la sala.
T: Ahora que Alexandre ya es mayor de edad, necesita unas clases de cómo tratar a las putas baratas, como ella. Los dos chicos estaban sentados en un sillón y yo me senté en medio de ambos a escuchar las palabras de Tom. Tom les habló de varios temas relacionados con sexo, en algunas tenía razón y en otros, no, pero los chicos escuchaban atentamente.
T: Cuando quieran follar a una puta siempre deben hacer preguntas sobre lo que desean hacer y si tiene un cargo adicional. Por ejemplo, yo le preguntaría a ella (refiriéndose a mi):
T: ¿te dejas tomar fotos? Responde responde
C: Si, siempre y cuando no se vea mi cara
T: ¿Videos?
C: Igual, pero es más difícil de controlar.
T: ¿Te gusta que te follen la boca?
C: Si.
T: ¿Que te jalan del cabello?
C: Si
T: ¿Que te insulten?
C Si
T: ¿Que te escupan?
C: No, que asco.
T: ¿Que te abofeteen?
C: muy duro no.
T: ¿Que te azoten?
C: Si, pero no demasiado fuerte.
T: ¿quieres sexo anal?
C: No siempre, pero si lo he practicado.
T: ¿Te gusta exhibirse?
C: Si.
Los tres chicos, era evidente la erección que tenían y los deseos de sexo. Igualmente yo seguía deseando que me penetrarán.
T: ¿Eres obediente?
C: Si, siempre y cuando no se propasen y el chico me atraiga
T: Y conmigo eres obediente.
C: si
T: ¿Qué os gustaría pedirle a ella?
El amigo de Alexandre, no lo tuvo que pensar mucho y pidió que me desnudará frente a ellos. Escuché la solicitud, me puse de pie, frente a Tom y dándole la espalda a los chicos, me saque el vestido por encima de la cabeza, me quedé quieta un instante y luego me di la vuelta para que los chicos me vieran de frente y me volví hacia Tom y le dije…
C: Satisfecho, mi negro.
T: Si, mi puta barata y me dio una palmada en una nalga.
C: Ahora me toca a mí, quiero ver esos penes. Lo dije mirando fijamente a los ojos a Tom.
T: Yo no sé ellos, pero a mí, tú me desnudas.
Procedí a desnudar a Tom y luego volví a ver a los chicos que solamente se habían bajado los pantalones y sus penes estaban mirando al cielo. El pene de Alexandre ya lo conocía y del otro chico, era del tamaño normal. Los miré y dije que eran uno ricos especímenes.
T: para que pongan en práctica todo lo aprendido, podrán estar 15 minutos con ella solos en el cuarto, lo que hagan o no hagan es un negocio entre ustedes.
Volví a mirar a Tom y dije que estaba bien pero que tenían que seguir las reglas que yo les definiera. Ambos dijeron que sí, sin pensarlo mucho.
Le di la mano al amigo de Alexandre y caminamos a la habitación. El chico no perdió tiempo y puso su mano en mi culo, clavando prácticamente un dedo en mi ano.
Ya en la habitación, el chico no perdió tiempo y tomó mis tetas con sus manos y comenzó a tocarlas…
C: Chupalas.
El chico comenzó a chuparlas y yo comencé a masturbarlo. Él no tardó en correrse. Yo le regalé mi mejor sonrisa y le dije al oído…
— no te preocupes yo no diré nada, pero sigue chupándome las tetas que lo haces muy bien.
Aunque había cumplido mi propósito de cómo controlar a dos chicos inexpertos. El chico hizo lo que le pedí y después le dije, llama a Alexandre, ya pasó el tiempo.
Alexandre entró y el otro chico también, le dije, ahora solo es para Alexandre.
Con Alexandre, no dude en darle sexo oral, sin muchos juegos previos y cuando sentí que se iba a correr, hice que se corriera en mis tetas. Al terminar le dije a Alexandre que iba a asearme y ya regresaba a la sala.
Cuando volví a la sala, estaban los 3 desnudos y Tom con una gran sonrisa, tenía un antifaz de dormir en su mano y dijo…
T: todavía faltan mis 15 minutos, pero eso lo dejaremos para después, ahora quiero jugar un juego.
C: ¿Cuál juego?
T: Adivina quién te está comiendo el coño.
Tom al verme dudar, no perdió tiempo y se acercó a besarme y tocarme toda al frente de los chicos, frotaba sus dedos sobre la tela del hilo que todavía llevaba y que estaba bastante mojado, después llevó uno de sus dedos a mi boca y me pidió que los chupará como si fuera su pene; yo obedecí y luego sentí unas manos en mis nalgas y escuché decir a Tom…
T: No, no. Ella es mía.
Luego me di la vuelta y Tom quedó detrás mío y yo frente a los chicos. Mi excitación estaba al máximo y estaba totalmente entregada a los deseos de Tom.
Tom comenzó a besar mi cuello, apretar y pellizcar mis pezones y después introdujo sus dedos por debajo del hilo y comenzó a masturbarme. Yo gemía y movía el culo hacia atrás para sentir el pene duro y venoso de él. Cuando mi respiración estaba más acelerada me dijo ¿quieres jugar sí o no?
C: Tu ganas, cabrón.
Tom, siguió masturbándome hasta que tuve un orgasmo frente a los chicos. Dio tiempo que se recuperará y me dijo:
T: quítate el hilo, siéntate al borde del sillón con las piernas abiertas.
Tom me puso el antifaz, me senté en la esquina, subí mis piernas al sillón, quedando mi coño a la disposición de quien lo quisiera, me sujeté del respaldo del sillón y dije que estaba lista.
El primer chico que me acerco, sin duda era Tom, pues comenzó a pasar su lengua y a besar mi coño, literalmente me penetró con su lengua. Yo puse mis manos sobre la cabeza del chico, entonces no que no tenía cabello, confirme que era Tom y le pedí que no se detuviera, Tom siguió hasta que tuve un intenso orgasmo. Eso excito mucho a Tom y les dijo que la clase había terminado y me llevó a la habitación, aun con mis piernas temblorosas.
En la habitación, me pidió que le diera sexo oral, lo hice de la forma que a él le gusta, después me pidió que le pusiera el preservativo y me sentará sobre su pene...
C: Eres un cabrón, nunca me han hecho esperar tanto para que me follen, hijo de perra.
Y aceleré mis movimientos hasta que Tom se corrió.
Entonces me pidió que fuera a por unas cervezas a la cocina, al regresar había una luz de un cuarto encendida, me asomé sin hacer ruido y vi a Alexandre masturbándose con mi hilo, lo olía y después lo frotaba en su pene.
Lo estuve mirando, de pronto sentí a Tom, amasando por detrás mis tetas y después mi coño, mientras veía a Alexandre masturbarse con mucha intensidad. A poco tiempo, Tom me dijo…
C: Ve y le ayudas.
Pese a que estaba cansada y con sueño, las caricias de Tom habían logrado su cometido y ya sentía mi coño húmedo y mis pezones duros de nuevo. Así que entré a la habitación y dije…
C: Creo que conozco una forma más gratificante. ¿Puedo?
Alexandre se quedó de piedra y dijo sí. Me puse al pie de la cama y caminé como una gata hasta llegar a su pene, lo olí y me lo llevé a la boca y comencé a chuparlo. No tardé en sentir, como Tom, me masturbaba con sus dedos, primero uno y después dos. Yo continué mamando y le pregunté a Alexandre si le gustaba. Alexandre respondió que sí, llevo sus manos a mi cabeza, para marcar el ritmo y en algunos momentos hacer que me lo tragará todo y se quedaba inmóvil con todo su pene dentro de mi boca.
Tom cambió sus dedos por su pene y comenzó a penetrarme violentamente. Tom estaba de pie al inicio de la cama, yo de 4, intentando seguir mamándosela a Alexandre.
Alexandre se corrió en mi boca casi al mismo tiempo que tenía un nuevo orgasmo, lo cual hizo que se me dificultara tragarme el semen por lo que en mi cara quedaron restos de semen. Tom por su parte seguía con su pene duro y me dijo no puedes dejarme así, por lo que me senté en la cama y tomé su pene entre mis manos, lo acaricié y lo comencé a mamar hasta que se corrió, le dijimos buenas noches a Alexandre, aunque ya comenzaba a amanecer.
Regresamos al cuarto de Tom, conversamos sobre lo que había pasado. Entre los dos nos tomamos una cerveza. Yo me duché y le dije que iba a pedir un Uber, para irme a dormir a casa.
Antes de irme me dijo que me quería ver el próximo sábado…
mayo2023womanpenelope.es