aprende con penelope
Primera Guia manual del Morbo.
Exclusivo para mujeres
de Woman Penelope
aprende a apreciar lo que tienes antes de que el tiempo te enseñe a apreciar lo que tuviste
Una encuesta realizada a 64.000 personas muestra que a la mayor parte de la población le gusta acostarse con su pareja de manera salvaje
Si te gusta el sexo duro, no estás sola.
Cuando realizamos este estudio, fue por un deseo expreso de una asociación de mujeres las cuales, nos pedían investigar mas sobre este tema, el SEXO DURO, y nos pusimos a trabajar sobre ello, fueron meses de muchos datos, entrevistas y selección de mujeres de todos los continentes y pudimos encuestar a más de 94.000 mujeres sobre sus fantasías en la cama, el sexo duro resultó ser una de las dos opciones más comunes. La mayoría, independientemente del género u orientación, se ha excitado con la idea de realizarlo o ya lo han experimentado comprobando lo gratificante que puede ser.
El atractivo generalizado por esta forma de hacer el amor también se puede ver en los hábitos de visualización de pornografía. Por ejemplo, si miras los géneros más vistos en paginas web de videos porno, el "hardcore" aparece constantemente en los primeros puestos avanzando en todas las categorías año tras año. Curiosamente, en contra de lo que se pueda pensar, a las mujeres les gusta más este tipo de pornografía que a los hombres.
¿Por qué es tan excitante?
La mayor parte de el estudio, el 68% señaló que había practicado este tipo de acto recientemente. Entre los comportamientos sexuales más frecuentes que contaron se encuentra arañarse, azotar, pegarse de manera controlada, insultos, romper la ropa, atarse y vendar los ojos. Es una sensación como de sentir una violación y menosprecio, basándose solo en sexo y placer, en ningún caso ni abuso ni violencia.
Son conductas consensuadas que, en la mayoría de los casos, ocurrieron en el contexto de una relación a largo plazo y rara vez menos del 1% de el juego, causaron algún tipo de lesión grave. En otras palabras, no estamos hablando de comportamientos en los que la gente realmente quisiera dañar a su pareja.
De hecho, la gente que lo probó había disfrutado realmente de este tipo de actividad. Cuando se pidió a los encuestado que establecieran una diferencia entre el sexo duro y el "convencional", tanto hombres como mujeres señalaron que los orgasmos son más frecuentes e intensos, ya que las parejas hacen más esfuerzos para satisfacerse mutuamente, el acto es más excitante y el acto es más vigoroso.
Concretamente las mujeres dijeron que tienen un orgasmo mucho más rápido cuando hacen el amor de una manera más salvaje. Dado que ya existe una gran disparidad en cuanto al tiempo que les lleva a los distintos sexos para alcanzar el clímax, tal vez esta es una razón por la que ellas lo buscan más que ellos cuando ven porno: el sexo duro podría ayudar a cerrar la brecha temporal entre orgasmos.
¿Qué lleva al sexo duro?
Las mujeres que participaron en este estudio recibieron una lista de posibles factores desencadenantes del sexo duro y se les pidió que anotasen si alguna vez su pareja les pidió tenerlo.
Entre los desencadenantes más comunes estaban probar algo nuevo, el aburrimiento y cumplir una fantasía. Estos datos sugieren que a manudo se trata de alimentar nuestra necesidad de novedad sexual. Los humanos, hombres y mujeres por igual, tienden a cansarse de las rutinas sexuales. Necesitamos seguir innovando para mantener la excitación, un fenómeno que lleva el nombre de el efecto Coolidge (disminución del apetito sexual por monotonía o aburrimiento).
Otro factor que podría llevar a este tipo de relaciones sexuales, especialmente entre los hombres, es que sospechen que su pareja le ha sido infiel. En este estudio se interpreta estos resultados como una cuestión evolutiva: cuando ellos perciben un riesgo de que su pareja femenina haya tenido relaciones sexuales con otra persona, esto desencadena la competencia de los espermatozoides. En otras palabras, lleva a los hombres a participar en comportamientos sexuales como penetraciones profundas y vigorosas, destinados a desplazar cualquier semen que haya sido depositado por rivales para que su propio esperma tenga una mejor oportunidad de fertilizar.
Beber alcohol fue otro desencadenante: las bebidas espirituosas reducen simultáneamente las inhibiciones sexuales y atenúa las sensaciones sexuales. Esta combinación de factores aumenta las probabilidades de intentar algo que de otro modo no podría hacer mientras se está sobrio, al tiempo que experimenta con actividades más intensas para contrarrestar el efecto deprimente que el alcohol tiene en nuestro sistema sexual (que incluye suprimir la excitación y retrasar el orgasmo).
Por último, otro factor desencadenante incluye situaciones en las que las parejas se encontraban en un estado de excitación fisiológica mayor, como acabar de terminar una pelea, estar enfadados o haber hecho ejercicio. Esto puede explicarse por algo que llamamos "transferencia de excitación", que ocurre cuando se amplifica la excitación a otra situación no relacionada. En otras palabras, si el cuerpo ya está excitado antes del comienzo de un encuentro sexual, eso sentará las bases para buscar una experiencia más activa e intensa.
Lo que todo esto nos dice es que no hay una sola razón por la cual el sexo duro sea un tema tan recurrente de fantasía sexual y porno. En cambio, resulta que hay muchos factores diferentes que atraen a las personas.
octubre2024@womanpenelope.es