aprende con penelope
Woman Penelope
Experiencias Basadas en Hechos Reales
nunca te definas por tu pasado. tan solo fue una lección, no una sentencia de por vida
Buscamos una pareja embarazada que quisiera compartir juegos
Me llamo Julien y mi esposa Claire. Los dos vivimos en Costa Brava desde hace un par de años, pero somos de la Bretaña francesa. Hemos viajado mucho porque los dos trabajamos de modelo de pasarela, pero como he dicho, hace un par de años decidimos afincarnos en España, porque es un bello país.
Claire es preciosa, es la mujer de mi vida : cariñosa, divertida y excelente amante. Es rubia, con unos lindos ojos y unos labios carnosos. Su pecho es perfecto, para mi gusto, no demasiado abundante. Es una de estas mujeres que te giras cuando te cruzas con ella.
Yo tengo el pelo largo, de color castaño. Mido un metro ochenta y tengo los ojos marrón claro. Los que entienden de estas cosas dicen que soy muy atractivo y no voy a ser yo quien les contradiga.
Una de las cosas que mas nos satisface de nuestra relación es la generosa actividad sexual que compartimos, y la confianza que tenemos el uno en el otro. Mi mujer, hay que decirlo, es sexualmente muy activa. Y tengo la suerte de que me adora, así que nunca ha tenido un no por respuesta a cualquiera de mis fantasías eróticas.
En mas de una ocasión hemos compartido cama con otra mujer, con otro hombre o con otra pareja, lo que, sin duda alguna nos ha unido cada vez mas como pareja.
Una de mis fantasías ocultas había sido hacer el amor con una mujer embarazada. Creo que una mujer, con 6 o 7 meses de embarazo, con la barriga hinchada, los grandes pechos, las curvas... son mas femeninas que nunca. Pero, claro, por nuestra profesión, mi mujer ahora no se puede permitir quedarse embarazada, así que ambos decidimos buscar alguna chica dispuesta a ello.
La idea se le ocurrió a Claire...
Porque no vamos a una tienda de ropa que tengan ropa premamá y buscamos una pareja con quien hacer intercambio?
La idea me encantó. Era viernes por la tarde, así que las tiendas no estarían abarrotadas como lo podrían estar un sábado, y Claire y yo salimos de cacería.
Llegamos a un H&M y nos fuimos a buscar la sección premamá. Casualidades de la vida, caía justo al lado de la sección de lencería, y Claire empezó a coger ropa interior, la mas sexy que encontró.
Nos dirigíamos al probador cuando Claire me hizo un gesto con la cabeza : en la sección premamá, una pareja de jovenes miraban ropa distraídamente. Ella era morena, con el pelo rizado, de estatura media y lucía una excelente barriga de calculo, unos 5 meses y pico. Como aun era principios de otoño, y el frio no había atacado mucho, sus ropas eran aun ligeras por lo que pude apreciar que su pecho era realmente abundante.
Claire estaba ya repasando con la mirada al chico, alto, joven, de unos 27 o 28 años, y unos ojos azules que seguro que a Claire le encantarían.
Teníamos que esperar a que cogieran algo de ropa para probarse y bingo! Al cabo de un par de minutos, ambos se dirigían hacia los probadores con un par de camisas y una falda.
Claire y yo también nos dirigimos a los probadores que en aquel momento se encontraban vacíos, y pude observar la fugaz mirada que le propinó aquél chico a mi mujer. Era un buen comienzo!
Dentro de los probadores, Claire soltó toda su sensualidad : se probó los sostenes con la cortina medio abierta, asegurándose que el chico no perdía detalle de sus pechos, y yo, como si no me diera cuenta, le iba diciendo "géniale, cheriee! parfait!", a cada prenda que se probaba.
Finalmente salió ella con una camiseta de tirantes ajustada y su marido dijo…
— "Te queda perfecto!" -
—"No me hace muy gorda?"
— "Que va, estas preciosa" ...
Era el típico diálogo. Yo, que me encontraba a escasamente un par de metros dije…
— Embarazada, no? Que ilusión!
— Si, - dijo ella, sonriente, -va a ser una niña!
— Una preciosa niña, sin duda! Como su madre -apuntilló su marido.
— Para cuando?
— Para enero, finales de enero.
... Total que nos pusimos a hablar y Claire, cuando oyó que hablábamos los tres, salio como si no se hubiera enterado, con su mejor conjunto : un tanga, sujetador y medias con ligueros, blanco todo el conjunto, y muy muy transparente…
— Qué tal este, Juju?
— UUuaaau !! Dijimos los tres (aunque el que mas babeaba era el chico de esta pareja).
— Que envidia ! - dijo ella.- con la figura que se me esta poniendo, cada vez puedo ponerme menos lencería!
— Como que no? Espera ... -
el chico salió y los tres nos miramos divertidos... Volvió al minuto y medio, con el mismo conjunto que llevaba Claire…
— Pruébatelo.- dijo él, entregándole el conjunto a su mujer.
— Estas loco? Que no tengo su tipito!
— Tu pruébatelo y lo veremos...
Al minuto y medio ella desde dentro del probador dijo…
— mira a ver qué te parece...
Él, discretamente, abrió solo un poquitín la cortina y dijo…
— Ves lo que te dije? Estas genial!
No llegamos a ver nada, pero aquello me puso loco! Tenia que ver aquella mujer, con aquél conjunto!!!
Salimos los cuatro a pagar y en la cola, los 4 nos pusimos a hablar. Nuestro acento delataba que éramos franceses y así se lo explicamos. Pagamos, seguimos hablando y decidimos hacer un café.
La conversación era de lo mas agradable. Ellos se llamaban Daniel y Cristina. Tenían una tienda de suministros informáticos en Barcelona.
Eran las ocho pasadas cuando Claire dijo…
— Si no tenéis planes para hoy, estáis invitados a cenar.
Se miraron y dijeron …
— Porque no?
Así que nos dirigimos a nuestra casa. Es una joya que encontramos a un precio ridiculo en una subasta de estas.
Necesitaba reformas, y estaba un poco lejos del centro del pueblo, pero esto era lo que mas nos gusto. La piscina que tenia estaba hecha polvo, pero era inmensa, y nosotros aprovechamos las obras para transformarla en una piscina con forma de 8, y añadirle un jacuzzi en un rincon.
Llegamos a eso de las nueve. Hacia una temperatura excelente y sugerí …
— Prepararé algo de cena. Si queréis, mientras, podéis bañaros.
— Yo te ayudo con la cena. Si queréis podéis ir vosotras...
— Me parece bien, - dijo Claire- Cristina y yo nos vamos al yacuzzi!. Que por un día trabajen los hombres!
Waw, Cristina no tenia bañador, así que tendrían que bañarse en bolas. Claire siempre se bañaba desnuda, pero habría que ver si Cristina tenia las mismas costumbres...
Dani y yo preparamos un plato de pasta y ensalada. Cuando lo teníamos todo preparado salí al jacuzzi con un par de toallas para que se secaran.
Las dos estaban dentro del agua, relajadas y charlando distraídamente.
Parecía que estaban desnudas, pero solo les sobresalían las cabezas y las burbujas no dejaban ver mucho mas...
— La cena esta lista, chicas. Os he traído toallas.
— Gracias, mon amour - dijo Claire, saliendo del agua.
Efectivamente estaba desnuda. Le dejé una toalla al lado de Cristina y me fui a arropar con la otra a Claire, dejando a un lado a Cristina, para que no se sintiera incómoda. Pero no pareció que lo estuviera mucho. Salió sin demasiado pudor y se secó delante mio sin remilgos. Pude entrever algo de sus pechos y de su vello púbico, pero muy de refilón. Y como no quería forzar las cosas salí rápidamente del jardín y volví al comedor a ayudar a Daniel a poner la mesa.
Cenamos en el salón y al terminar, dije …
— Bueno, nosotros ya hemos trabajado. Nos vamos a bañar. Os toca recoger!
Daniel y yo salimos, y le dije …
— Tienes que probar el jacuzzi. Es una pasada.
— Joder, ya te digo ! Cristina ha dicho que es una autentica gozada.
No se como había llevado el tema mi mujer, pero yo lo que hice es desnudarme como si nada y vi que él también hacia lo mismo. Nos pusimos en bolas y puse uno de los programas de burbujas relax, supongo que el mismo que había puesto Claire antes de cenar.
Allí nos quedamos charlando hasta que aparecieron ellas dos...
— Qué? A que es un gustazo? - le dijo Cristina a su marido.
— Ya te digo !
— Habra sitio para nosotras? - dijo Claire, con un punto de descaro.
Yo veía por donde iba Claire, pero yo, antes que nada, quería ver aquella mujer con el conjunto de ropa interior. Así que dije…
Yo pensé que nos haríais un pequeño desfile de los conjuntos que os habéis comprado...
— Uuuy, me parece que en mi caso va a ser difícil! Con el barrigón que tengo, no se yo la pinta que tendré...
— Que tonta que eres,- le dijo Dani -estas preciosa y de lo mas sensual. Ya veras, póntelo a ver que opinan.
Claire, vio que necesitaba un empujoncito la cogió y le dijo…
— Ven, que les vamos a hacer una pasarela.
La cogió de la mano y se la llevó para dentro.
Aparecieron a los 5 minutos. Las dos con el mismo conjunto blanco, transparente. Entraron riendo y haciendo movimientos sensuales exagerados, en plan de coña.
Pero el hecho es que estaban buenísimas y me pusieron como una moto. Y seguro que a Dani también. Vi como miraba a mi mujer y pense "esto va viento en popa"…
— Waaaw - gritamos los dos al unísono - vaya bombones ! Tías buenas !
Y nos pusimos a silbar y a decir piropos.
A Cristina se le marcaban unos pechos preciosos, abundantes y con unos pezones oscuros, y la entrepierna le dejaba entrever un pubis (que antes no había podido ver demasiado bien) bien cuidado pero con pelo abundante, como a mi me gustan.
Su barriga, grande, de preñada, aun no presentaba estrías, pero verla así, preñada y con aquel conjunto, era exactamente lo que yo había deseado.
Cristina dijo …
— No veas tu qué comparación ! Yo con estas tetas que parecen ubres y con lo gorda que estoy, al lado tuyo que estas hecha un figurin...
— Queee dices, -dijo Claire- estamos las dos de muerte, no ves como nos miran!
Y de pronto riendo se susurro algo al oído...
— Veras si les pones o no a los hombres ! - Y mirándonos dijo- esperad un minuto.
Entraron las dos y en el salón (que daba al comedor) se oyó que empezaba a sonar la musica de 9 semanas y media! NOS HARIAN UN STRIPTEASE !!! Bien por Claire !
Efectivamente, por los 2 lados de la cortina del salón asomaron las piernas de Claire y Cristina, con las medias y los ligueros.
Las dos salieron, y pudimos ver como Cristina repetía (con mucha soltura y sensualidad, hay que decirlo) los movimientos que hacia Claire.
Se empezaron quitando el corpiño, luego, los ligueros. Poco a poco, se enrollaron las medias hasta abajo. Todo con nosotros haciendo bromas, silbando y ellas acercándose a nosotros, mostrando el sostén y poniéndonos como motos.
Estaban ya las dos en tanga y sostén. Y vi que Claire se ponía de espaldas a nosotros, al lado de Cristina, se desabrochó el sostén y ... Cristina le siguió el juego.
Se quitaron los sostenes y quedaron una delante de la otra. Claire doblo un poco las piernas (porque era mas alta que Cristina) de manera que los dos pares de pechos quedaban a la misma altura. Se abrazaron y, en un momento que nos hizo reír a todos, Cristina le cogió las manos y hicieron como si bailaran un tango. Fue una cómica manera de romper aquel momento que se estaba calentando por momentos.
Las dos se cogieron de la mano, y se pusieron ante nosotros, solo con el tanga, y saludaron como si se tratara del final de una función. Con ello pudimos disfrutar de ellas en topless. La visión era alucinante : a la derecha quedaba mi preciosa mujer, con su figura de modelo, sus pechos juguetones y a su izquierda, nuestra nueva amiga, con sus grandes pechos, sus pezones grandes y oscuros, su hinchada barriga y sus contorneadas formas. Que pasada ! Pero claro, estaban aun en bragas y nosotros lo queríamos ver todo !…
— QUEREEE-MOS MAS ! QUEREEE-MOS MAS ! - decíamos Dani y yo.
— Uy, con lo estrecho que es este tanga, como no me ayudes a quitarmeloooo, - dijo Cristina, riendo ...
— Pos allá voy ! - respondió Dani,
que salió del agua sin ningún tipo de pudor, con una erección tremenda y Claire y yo pudimos ver que gastaba, si se me permite el comentario, un pollon considerable. Dani se puso detrás de Cristina y, al ritmo de la musica, le empezó a bajar el tanga, acariciando la por todos lados, metiéndole mano por entre las piernas y por las inmensas tetas. Ella tenia los ojos cerrados y parecía disfrutar, y mas nos hacia disfrutar cuando en un par de ocasiones, los abrió para mirar a los dos espectadores y sonreír...
Cuando se hubo quedado en bolas dijo …
— Para, para, que me conozco ! Me voy al agua, que ... necesito un buen baño.
Y dicho esto, se metió desnuda en el yacuzzi conmigo.
Claire, que aun estaba fuera, en tanga, le dijo a Dani …
— Bueno, y a mi no me vas a quitar el tanga, o que?
Dani me miró y yo dije …
— Si a ti no te importa que se haya acabado la canción, a mi tampoco !
Así que Dani se puso detrás de Claire y, tal y como había hecho con su mujer, empezó a quitarle el tanga a Claire, acariciando la por entre los pechos, por el cuello, por entre las piernas, ...
Bajito, le dije a Cristina …
— Son buenos, eh?
— No se si son buenos o no, pero yo me estoy poniendo como loca!
Yo, discretamente, por debajo del agua, empece a acariciarla por el muslo y vi que ella también se dirigía hacia mi pene, que por aquél momento estaba ya mas tieso que un mástil. Sin que se notara, mientras Dani y Claire se ponían a bailar desnudos, de manera muy provocativa, Cristina y yo nos estábamos masturbando el uno al otro.
De pronto, Claire, que estaba de pie, delante de Dani, dandole la espalda, se giró lo rodeó con una pierna y, con una mano, se introdujo el pene de Dani de golpe. Su mujer y yo, intensificamos la masturbación, hasta que ella, se puso de pié y me dijo …
— Ten cuidado con mi barrigón ...
Y, dándome la espalda, se sentó sobre mi miembro, dentro del agua, empezando un metesaca delicioso. Como yo estaba detrás suyo, debajo, podía acariciarle las tetas, aquella deliciosa barriga de preñada, acariciarle entre las piernas, y ella no paraba de subir y bajar.
Mientras tanto, en el césped, a 3 metros de nosotros, Claire se había puesto en la posición del perrito y le ofrecía el culo a Dani, que no se hizo de rogar.
Aquello era mas de lo que podía soportar y le susurré a Cristina que me estaba a punto de correr…
— Tranquilo, que no me vas a dejar preñada. Lléname de tu leche calentita, cabrón!
Esto ultimo lo dijo en alto, para que su marido se enterara, lo que sin duda lo calentó (y a mi también) ya que Dani y yo nos corrimos al instante, yo dentro de la barriga de la mujer de Dani, y él, dentro del culo de mi esposa. Fue colosal!
Ya mas relajados, nos pusimos los 4 en el jacuzzi, hablando y acariciándonos sin ningún tipo de pudor.
Aquello fue el inicio de muchos grandes polvos con Cristina, Dani y mi mujer
mayo2023womanpenelope.es